Robo al Madrid
El Real Madrid sufrió de lo lindo para ganar a un Rayo que plantó cara en la primera parte pero que se diluyó como un azucarillo en el último tramo del partido. No ayudó un Melero López convertido en gran protagonista tras no pitar un clarísimo penalti de Amaya sobre Cristiano. Para más inri, el andaluz amonestó a un incrédulo CR7 que no se explicaba la decisión del colegiado. El particular show del árbitro despertó a un equipo que había sesteado en Vallecas sin un rumbo claro.
Los de Ancelotti tiraron de orgullo y lograron un triunfo muy importante, ya que un pinchazo en este derbi habría puesto la Liga en bandeja al Barcelona. Hubo bronca del italiano en el descanso, aunque fue Melero López y no el entrenador el que terminaría por reactivar a un conjunto blanco que entró tarde y frío en el encuentro. El Madrid se crece ante las adversidades, y eso es precisamente lo que ocurrió en una extraña noche. La famosa casta sirvió para llevarse los tres puntos y seguir con una persecución que aún puede tener final feliz.
Para el partido ante el Eibar, Ancelotti no podrá contar con Kroos y James. Además está por ver si el Comité de Competición retira la injusta y vergonzosa amarilla que vio Cristiano Ronaldo. Tratándose de un órgano dependiente de la RFEF, el veredicto ya se conoce de antemano. El Madrid recurrirá, con más indignación que esperanza, la cartulina que vio el luso y que le impide estar el sábado en el Santiago Bernabéu. En realidad, la culpa fue de Cristiano. Mira que no retirar la pierna... ¡Melero, tarjetero!