.

Joventut 80-76 Real Madrid: sin dirección desde el banquillo ni acierto en cancha

de Diego Rivero Mosqueda
Real Madrid

El Real Madrid visitó Badalona con la esperanza de poder seguir con la buena racha tras la victoria épica ante el Barcelona en Euroliga, y el primer cuarto así lo mostró. Con el cansancio a cuestas, los blancos mantuvieron un nivel de acierto algo pobre, como el propio Joventut, pues los catalanes no pudieron atacar la zona defendida por Serge Ibaka. Asimismo, Andrés Feliz continuó teniendo minutos de calidad para recuperar la forma perdida tras su lesión, aunque no estuvo muy acertado. Pese a ello, los locales, con Sam Dekker a la cabeza, pudo generar puntos gracias a una media distancia académica.

El segundo cuarto llegó con las mismas premisas que el primero, pero con la novedad de Hugo González sobre el parqué. Quien no terminó de arrancar fue Feliz, con una actuación más negativa que positiva, aunque esto último fue eclipsado por la vuelta de Usman Garuba con la camiseta blanca, tras tantos problemas físicos. Al español, como es normal, se le vio falto de ritmo, aunque era lógico tras tanto tiempo de baja. Pese a ello, todo se repitió, pues el marcador estuvo completamente igualado en todos los parámetros. De romper el ritmo se encargó Sergio Llull con un gran triple tras bloqueo del de Azuqueca, mientras Facundo Campazzo volvía a demostrar por qué era el mejor base de Europa, recuperando dos balones para poner más tierra de por medio antes del descanso.

Tras el paso por vestuarios tampoco cambió mucho la película, ya que el Real Madrid no pudo quitarse al Joventut de la cola, y el marcador no se despegó en global, ni para un lado ni para otro. De hecho, los blancos se alejaron en casi diez puntos en el electrónico, aunque no duró mucho, ya que el acierto desde el exterior de Kassius Robertson fue un auténtico problema para la defensa madridista, algo que también repitió en la primera mitad. Tanto fue, que los de Badalona se pusieron por delante aunque fuese por dos míseros puntos. Así terminó este periodo, con casi un 50% en triples para los locales, que incluso dominaron en el rebote ofensivo gracias a un posicionamiento de los interiores excelso, pero con todo por decidir.

Los últimos diez minutos comenzaron con un parcial horrible en contra del Real Madrid, algo que aprovechó Dekker, el exjugador de Houston Rockets, para poner tierra de por medio y seguir sumando. En la parte positiva, Gabriel Deck sumó un triple muy necesario, pero contrarrestado fácilmente por Devon Dotson y Pau Ribas. Los blancos siguieron fallando desde el exterior estando liberados, y esto lo aprovechó la Penya para ampliar su ventaja. La labor del alero argentino, sobre todo en el rebote defensivo, fue clave para poder acercarse poco a poco, mientras que Campazzo hizo todo y más en la dirección de juego, pese a que las rotaciones de Chus Mateo fueron terroríficas. La técnica al base americano de Joventut ayudó a los madridistas a calmar el partido, mientras que Mario Hezonja se encargó de ejecutar desde más allá de ocho metros. Pese a ello, estos sesenta segundos fueron muy intensos en todos los sentidos, y no se decidió hasta el últimísimo lanzamiento, en favor de los locales.


Descarga la app de BERNABÉU DIGITAL gratis: ¡Toda la actualidad del Real Madrid en tu bolsillo!
Haz clic aquí para seguir a Bernabéu Digital en X
Haz clic aquí para seguir a Bernabéu Digital en Facebook
Otras noticias
PUBBLICITÀ