Abidal podría tener las horas contadas en el Barcelona
de Alejandro Cascón Guerra
Eric Abidal se metió en un enorme charco con el propósito de justificar lo injustificable. Una gestión del cambio de técnico y de la sesión invernal de mercado indecente. La réplica de Lionel Messi (ex compañero de vestuario del francés) a la justificación del despido de Valverde "porque había jugadores insatisfechos o que no trabajaban mucho" aprieta como una soga al cuello. La renuncia a su cargo o la destitución se perfilan como únicas alternativas. En un terremoto que, no debe extrañar, podría desembocar en la salida de una Junta Directiva que ha evidenciado su incapacidad, tal y como publica TMW.