Alfredo Duro: "Estoy en deuda con el Madrid. Mi camino a Cardiff es un homenaje a todos los madridistas. Si pierde..."

Entre festejos, el madridismo ya piensa en volver a Cibeles. Pero antes deberá conseguir la Duodécima Copa de Europa ante la Juventus de Turín. Muchos aficionados ya ultiman detalles para su viaje a Cardiff dispuestos a animar a los suyos y otros, ya lo han empezado como Alfredo Duro. Desde Bernabéu Digital hemos entrevistado en exclusiva al periodista que participa como colaborador en el programa de tertulia deportiva, El Chiringuito de Jugones, en Mega y que está dispuesto a realizar una locura a la altura de muy pocos. Duro se siente en deuda con el Madrid.

Alfredo, ¿qué sensaciones le deja el Madrid tras la conquista de su Liga nº33?

"Las mejores. El rendimiento de este equipo no tiene techo y sus alternativas tácticas y de utilización de jugadores son un regalo para todo el madridismo. Después de cinco años no había excusa posible y la consecución de esta liga coloca nuevamente al Real Madrid donde le corresponde. Puede ser el comienzo de un ciclo que le puede dar tres o cuatro ligas consecutivas tranquilamente".

¿Cuánto de mérito tiene Zidane en todo esto?

"Tanto como el que más. Ha sido una obra maestra dirigida por Zidane con una sabiduría indiscutible. Es una liga que marca un antes y un después. Porque se ha ganado con dos equipos igual de competitivos y hambrientos. Nunca anteriormente se había podido imaginar una gestión como la de Zidane en el vestuario del Madrid. Demuestra que la talla de Zizou como entrenador está muy por encima de lo que se le concedió".

Respecto a su locura, cuéntenos un poco en qué consiste.

"Llegar a Cardiff haciendo el máximo de kilómetros posibles andando. Dividiendo el viaje en once etapas y recorriendo los lugares que estarían en la ruta de cualquier mochilero o peregrino. Ocurre que algunos hacen el Camino de Santiago y otros, a nuestra manera, hacemos el Camino a Cardiff. Es una manera de intentar devolverle al Madrid las alegrías y la felicidad que me ha proporcionado personal y profesionalmente durante toda una vida. No es una penitencia. Es un homenaje a todos los madridistas que darían lo que fuera por estar con su equipo en la final de la Champions. Ellos estarán empujando y por ellos también quiero hacer esto".

Usted quiere hacerlo como el tipo más madridista. En el día a día, ¿qué nivel de madridista se considera?

"Ni soy el más madridista ni pretendo serlo. No hay madridistas de primera y segunda categoría. Me considero alguien muy afortunado de poder haber vivido momentos de éxito y gloria con el Real Madrid. Y también de haber llorado con algunos de los momentos más duros que este equipo ha superado. Estuve en la final que se perdió en París con el Liverpool, en las dos ligas de Tenerife, en Valladolid y Valencia cuando también se perdieron ligas en el último partido... El Madrid no ha ganado siempre. Es una de las muchas extravagantes teorías que sus rivales siguen utilizando para justificar sus fracasos. Algo que nunca haría el Madrid".

La distancia de Madrid a Cardiff es de 1549Km, lo que a pie, se traduce en 297 horas. ¿Es consciente de la dificultad? ¿Hay posibilidad de marcha atrás o rendición?

"No sé si soy consciente del todo. Quería hacerlo y punto. No se trata de saber si puedo hacerlo o no sino de proponérselo. De saber que hay señales que la vida te envía de vez en cuando y que merece la pena intentar aquellas cosas que nos mantienen vivos. No soy joven, no estoy en plena forma física pero tengo una deuda con el Madrid y quiero intentar pagarla. ¿Marcha atrás? Imposible. El Madrid no se ha rendido jamás".

De manera muy breve, ¿qué es el Real Madrid para Alfredo Duro?

"Algo que justifica una manera de entender la vida y el fútbol. La voluntad de ganar por encima de cualquier otra cosa. De no renunciar a la esperanza de lograr lo imposible. Es el equipo más grande del mundo y eso sólo se puede entender aprendiendo cada día lo que Santiago Bernabéu, Di Stéfano, Amancio, Pirri, Juanito y tantos otros representaron para que este club fuera lo que hoy es".

Imagínese llegar a tiempo y ver al Madrid caer derrotado, ¿qué sensación le quedaría?

"Mi cupo de derrotas en una final de Copa de Europa lo cumplí en París en 1981. Hay cosas que sólo pasan una vez y que ya no se contemplan. Esto es el Madrid. Ganar es una obligación y eso, que tan difícil les resulta entender a los demás, nos convierte en las finales en una fuerza casi invencible".