La depresión de Cristiano

29.11.2015 18:38 de  Jorge Calabrés  Twitter:    ver lecturas
La depresión de Cristiano
© foto de Jorge Calabrés

Cristiano vive sumergido en una época gris y de tinieblas en la que hasta el gol se le resiste. En un estado de apatía permanente, solo contra el Shakhtar sacó de nuevo su sonrisa a relucir por un breve espacio de tiempo. Ante el Eibar se volvió a ver la frustración del luso. Incapaz de desbordar, fallando dos mano a mano ante Riesgo y solo logrando marcar de penalti y ya en el tramo final de partido. No es el Cristiano de siempre. Le falta algo. 

Entre mensaje y mensaje cifrado sobre su futuro se ha ido apagando el presente de Cristiano. El segundo semestre de 2015 es el peor medio año del portugués desde que viste la camiseta blanca. Pero es ahora, ante las dificultades y adversidades, cuando el madridismo reclama un punto más a su líder. Una pizca más de entrega, de lucha... e incluso en forma de declaración romántica al escudo. 

La marcha de Ancelotti y la llegada de Benítez significó una gran decepción para Cristiano. Sin feeling con el técnico madrileño desde el primer día, el portugués añora la mano izquierda de su querido Carletto. Pero no es momento para lloros ni para caprichos. Un jugador, y más una estrella, debe saber cuál es el lugar en el club y cuáles son sus funciones. Hay que pensar más en el colectivo y menos en lo individual. 

Cristiano debe pelear, luchar, sonreír, abrazar y, sobre todo, marcar goles. El conjunto blanco, en una etapa de rehabilitación tras el duro palo del Clásico, necesita de la fueza y el empuje del mejor CR7. Menos guiños al PSG y más defender al Real Madrid. Perdido o no en el sistema de Benítez, el luso debe dar un paso al frente y demostrar su jerarquía. Es la hora de los elegidos y Cristiano debe evidenciar, una vez más, que es uno de ellos. El Balón de Oro 2015 ya se le ha escapado por incomparecencia durante los últimos meses. Ahora debe comenzar a trabajar por recuperar el trono en 2016. Querer es poder. Y Cristiano lo sabe.